Después de publicar Las flores del mal, de Baudelaire, y Poemas, de Verlaine, completamos con esta antología bilingüe la serie que hemos dedicado a los poetas malditos. Tal vez Rimbaud sea «el gran maldito»; su vida y su obra han estado rodeadas de misterio, lo que ha agigantado su figura y es, sin duda, el poeta sobre el que más páginas se han escrito.
Hemos elegido como título «El barco ebrio» porque creemos que este poema es muy representativo de la obra y la vida de Rimbaud, tan alejadas ambas de las costumbres burguesas y de sus normas paralizantes, tan deseosas de infinito y de luz.
La tempestad bendijo mis desvelos marítimos.
¡Diez noches bailé, más ligero que un tapón de corcho,
sobre el oleaje, al que llaman eterno embrollador
de víctimas, sin añorar el necio ojo de los faros!
En esta ocasión, es la pintora Alicia Martínez quien ha entablado diálogo con el poeta y, así como la obra de Rimbaud es muy rica en matices y contrastes, también lo es la interpretación plástica de los poemas y las técnicas utilizadas por la ilustradora.
Nadie pudo desear más ardientemente entregarse que él. De niño se dio a Dios, de joven al mundo; y en ambos casos se sintió engañado y traicionado... La esencia de su ser permanece intacta, inconmovible, inaccesible.
Henry Miller, El tiempo de los asesinos
El barco ebrio y otros poemas
Después de publicar Las flores del mal, de Baudelaire, y Poemas, de Verlaine, completamos con esta antología bilingüe la serie que hemos dedicado a los poetas malditos. Tal vez Rimbaud sea «el gran maldito»; su vida y su obra han estado rodeadas de misterio, lo que ha agigantado su figura y es, sin duda, el poeta sobre el que más páginas se han escrito.
Hemos elegido como título «El barco ebrio» porque creemos que este poema es muy representativo de la obra y la vida de Rimbaud, tan alejadas ambas de las costumbres burguesas y de sus normas paralizantes, tan deseosas de infinito y de luz.
La tempestad bendijo mis desvelos marítimos.
¡Diez noches bailé, más ligero que un tapón de corcho,
sobre el oleaje, al que llaman eterno embrollador
de víctimas, sin añorar el necio ojo de los faros!
En esta ocasión, es la pintora Alicia Martínez quien ha entablado diálogo con el poeta y, así como la obra de Rimbaud es muy rica en matices y contrastes, también lo es la interpretación plástica de los poemas y las técnicas utilizadas por la ilustradora.
El barco ebrio y otros poemas
ISBN: 978-84-92683-33-8Tamaño: 19,5 x 26 cm.Encuadernación: CartonéPáginas: 144
Nadie pudo desear más ardientemente entregarse que él. De niño se dio a Dios, de joven al mundo; y en ambos casos se sintió engañado y traicionado... La esencia de su ser permanece intacta, inconmovible, inaccesible.
Henry Miller, El tiempo de los asesinos
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