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Clásicas y revulsivas: las 3 últimas novelas de Nórdica Libros

Cuando se trata de recorrer los enclaves literarios de Europa para hallar la mejor narrativa, ya sea clásica o contemporánea, en Nórdica procuramos encontrar aquellos títulos escritos magistralmente y que, al mismo tiempo, han significado algo especial en su país de origen.

Nuestros tres últimos títulos de narrativa nos han llevado a Finlandia, Inglaterra y a la República Checa. Tres autores y tres obras de referencia que te invitamos a conocer:

Los siete hermanos :: El blog de Nórdica Libros

Los siete hermanos, Aleksis Kivi.

Si hay una obra significativa para los finlandeses, que sienten como reflejo de su carácter e historia, esta es sin duda Los siete hermanos. La novela, escrita en 1870, combina como ninguna otra las hazañas de los protagonistas con asombrosas descripciones del paisaje finlandés. Su autor, Aleksis Kivi, que ha llegado a ser considerado uno de los 10 personajes más importantes de la historia del país, no obtuvo su merecido reconocimiento hasta décadas después. Los siete hermanos pasó a la categoría de clásico justamente por su certera comprensión del carácter finlandés: temperamento insumiso, lenguaje expresivo, singular sentido del humor… y su capacidad de supervivencia en condiciones adversas. Eso es, exactamente, lo que harán los siete hermanos protagonistas de esta magistral novela ajena al paso del tiempo.

«LAURI.—Pues yo lo único que digo es que nos larguemos al bosque y mandemos al diablo el embrollo del mundo.

JUHANI.—¿Qué?

AAPO.—Ya vuelve a delirar»

Sidra con Rosie :: El blog de Nórdica Libros

Sidra con Rosie, Laurie Lee.

Si la novela del finlandés Alexis Kivi fue capaz de conmover a la sociedad finlandesa por haber captado su esencia, Sidra con Rosie tuvo un efecto similar en Inglaterra. La novela de Laurence Edward Alan, publicada en 1959, narra su infancia y la adolescencia en clave autobiográfica. La singularidad de Sidra con Rosie fue precisamente la pericia de Laurie Lee para captar la vida rural que estaba perdiéndose a marchas forzadas en la Inglaterra de la primera mitad del siglo XX. Esta es la cita que elegimos para la contraportada del libro:

«Los últimos días de mi infancia fueron también los últimos días de la aldea. Yo pertenecía a aquella generación que vio, por casualidad, el final de una vida milenaria. […] Yo, mi familia, mi generación, nacimos en un mundo de silencio; en un mundo de trabajo duro y necesaria paciencia, un mundo de espaldas dobladas hacia la tierra, cuidado manual de los cultivos, dependencia de la meteorología y de la cosecha; un mundo en que las aldeas eran naves en paisajes vacíos y las distancias entre ellas largas; un mundo de caminos marcados por cascos y ruedas de carretas, no hollados por la gasolina y el petróleo, apenas transitados por las personas y casi nunca por placer, por los que lo que más rápido se movía eran los caballos.»

Puedes leer en elboomerang una magnífica reseña escrita por Javier Fernández de Castro.

Y lo que dijo el Sunday Times: «Sigue siendo tan fresca, llena de alegría y plena de sensaciones como cuando apareció por primera vez. Es un canto a la memoria.»

Clases de baile para mayores :: El blog de Nórdica Libros

 

Clases de baile para mayores, Bohumil Hrabal.

Satírica, sagaz y provocadora, el protagonista de Clases de bailes para mayores narra sus venturas y desventuras a lo largo de toda una vida libertina a una «bella señorita». La afilada prosa de Bohumil Hrabal cautiva por su humor que no deja de lado las desgarradoras confesiones.

Seleccionamos un fragmento de una interesante reseña en El placer de la lectura:

«En ‘Clases de baile para mayores’, y por toda la obra del autor checo, podemos encontrar el discurso alucinado y envolvente de Kafka; la sátira antimilitarista de Hašek y su buen soldado Švejk; o la diatriba contra el antiguo régimen imperial de Ladislav Klíma, el excéntrico autor de cuya obra transgresora e iconoclasta se sentía heredero Hrabal. Una cita de aquel sirve precisamente de pórtico al derroche verbal, heredero de una oralidad primigenia, al que se entrega aquí el protagonista de la narración.»

 

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